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Las abejas

Nota de prensa, 28 de Septiembre de 2012

PORQUE MUEREN LAS ABEJAS

Desde principios de 1990, directores BAYER han conocido los riesgos que los plaguicidas neonicotinoides crear para el medio ambiente. La empresa minimizó los riesgos, presentado estudios deficientes a las autoridades y vieron la caída masiva de las abejas melíferas y los polinizadores como “daños colaterales”. Aunque estos ingredientes ya están prohibidos en varios países, la compañía se niega a detener su producción. La seguridad alimentaria está en peligro a causa de descenso de la polinización. La Coalición contra los peligros de BAYER necesita el apoyo de la campaña “Save the beees”.

Durante veinte años Imidacloprid ha sido uno de los insecticidas más utilizados en el mundo para el campo y los cultivos hortícolas. A menudo se utiliza como aderezo de semillas, especialmente en el maíz, el girasol y la canola.
Imidacloprid se vende bajo los nombres comerciales ‘Gaucho’, ‘Confidor’, ‘Chinook’ y ‘Imprimo’.
Imidacloprid es pesticida más vendido de Bayer, las ventas del año pasado fueron 400 millones de euros. Más de 1,000 toneladas se exportan anualmente a 120 países.
Dado que la protección de patentes para Imidacloprid ha expirado, BAYER trajo un neonicotinoide similar a la del mercado llamado clotianidina (nombres de producto: “Elado ‘,’ Poncho ‘). Las ventas han ascendido a 192 millones de euros el año pasado. La sustancia se utiliza principalmente para el recubrimiento de las semillas de maíz y la colza.

Advertencias de las Naciones Unidas
Neonicotinoides son productos químicos sistémicos que se extienden a partir de la semilla de la planta y alterar el sistema nervioso de cualquier insecto que entra en contacto. Las neurotoxinas viajar al polen y néctar y puede envenenar a los insectos beneficiosos como las abejas. La llegada de los neonicotinoides coincidió con la aparición de grandes mortandades de abejas, por primera vez en Francia, más tarde también en Italia, España, Suiza, Alemania, Europa del Este, India, EE.UU. y Brasil.
La primavera pasada el Programa de las Naciones Unidas (PNUMA) publicó un informe sobre la mortalidad de abejas en todo el mundo. BAYER plaguicidas figuran allí como una amenaza para numerosos animales. De acuerdo con el informe, “Los insecticidas sistémicos, tales como los utilizados como revestimientos de semillas, que migran desde las raíces a través de toda la planta, hasta llegar a las flores, lo que potencialmente puede causar la exposición crónica tóxicos para los polinizadores no objetivo. Varios estudios revelaron la alta toxicidad de los estudios de laboratorio químico, tal como imidacloprid, clotianidina, tiametoxam y los ingredientes correspondientes para animales tales como gatos, peces, ratas, conejos, aves y lombrices. han demostrado que estos productos químicos pueden causar pérdidas de sentido de dirección, afectar la memoria y el metabolismo cerebral, y causan la mortalidad“.

Estudios deficientes
Las abejas de miel polinizan más de 70 sobre 100 cultivos que proporcionan el 90% de los alimentos del mundo. Ellos polinizan la mayoría de frutas y verduras, incluyendo manzanas, naranjas, fresas, cebollas y zanahorias. La población de abejas disminución tiene efectos graves para la seguridad alimentaria y el sustento de los agricultores.
Una evaluación interna de los EE.UU. Agencia de Protección Ambiental (EPA) se describen los estudios presentados por Bayer como “inadecuada”. Según la exposición de la EPA, las abejas, en particular, tienen un riesgo considerable. Debido a que el registro del producto se basa precisamente en estos estudios, estamos exigiendo el registro se retirará inmediatamente.

Prohibida en Francia y Alemania
El gobierno francés declaró que el tratamiento de semillas con imidacloprid conduce a importantes riesgos para las abejas. Imidacloprid fue prohibido como tratamiento de semillas de girasol en el año 1999, después de un tercio de las abejas francés murió después de su uso generalizado. Cinco años después se prohibió también como tratamiento para el maíz dulce.
En mayo de 2008 los apicultores del sur de Alemania informó que dos terceras partes de sus colmenas murió repentinamente. Insectos silvestres vivos disminuyó mismo. El gobierno alemán prohibió inmediatamente el uso de pesticidas de Bayer en el tratamiento de semillas de maíz y canola.
Mientras tanto, 1,2 millones de firmas se han recogido para subrayar nuestra demanda de retirar totalmente Gaucho y Poncho. Las firmas fueron entregadas a la Junta Directiva de Bayer en la junta de accionistas reciente. Sin embargo, la gestión continuamente pasa por alto todos los estudios e informes que muestran los peligros y efectos nocivos de los neonicotinoides. Traducido por Guillermo Luciano (FundaVida)